viernes, 13 de abril de 2012

"Las Uvas de la Ira": una película sobre la "Gran Depresión" de los Estados Unidos


Tom Joad (interpretado por Henry Fonda) acaba de salir de la cárcel, con libertad provisional, por haber matado a un hombre. Y al regresar a casa, se encuentra con que una poderosa empresa capitalista se ha apropiado de las tierras en que vivía y trabajaba su familia.
Ya nada del mundo que Tom conocía antes de caer en prisión existe. Es que, cuando estaba encarcelado, ocurrió la Gran Crisis Capitalista de 1929, por lo que cuando pudo salir, ya avanzados los años Treinta, se encontró con lo más duro de la Gran Depresión de los Estados Unidos: decenas de miles de familias campesinas despojadas de sus tierras y de sus hogares; millones de desempleados desesperados por algún trabajo que les permitiera, aunque fuera, subsistir; la miseria invadiéndolo todo y el hambre matando cada vez más… Al salir de la cárcel, Tom se encontró en un mundo sin Esperanza ni Fe: hasta el viejo predicador que, cuando niño, lo había bautizado, había perdido completamente su vocación, su espiritú….
Tom encuentra a su familia justo en el momento en que ésta, en un viejo camión abarrotado de personas y objetos, se dispone a emprender el éxodo desde el Estado de Oklahoma, en el centro de los Estados Unidos, hasta el Estado de California, en la costa Oeste, el cual, según los anuncios que llegaban a los desesperados granjeros, era una verdadera “tierra prometida”…
En el largo camino, la impotencia, la incomprensión, la humillación, el hambre y la violencia se cernirán sobre la familia de Tom, al igual que sobre millones de familias de los Estados Unidos y de todo el mundo.

Filmada en los EE.UU en 1940, “Las Uvas de la Ira” (titulada de esa manera porque la única esperanza de la familia de Joad era encontrar algún trabajo en la recolección de uvas en California), le permitió ganar un Oscar al Mejor Director a John Ford, uno de los más importantes cineastas de la historia. Basada en una novela del escritor John Steinbeck, ofrece una perfecta evocación de los Estados Unidos de los años 30, reflejando el clima de desolación, desesperanza y pobreza que vivía gran parte del pueblo americano a raíz del Crack del 29.
Durante aquellos oscuros años, el Cine, ya con la banda sonora incorporada, se convirtió en un espectáculo con llegada a millones y millones de personas. Los norteamericanos, en plena Gran Depresión, reivindicaron la entrada gratis para el Cine, ya que lo consideraban una necesidad básica, como el pan y el vestido. Había hambre de Cine: hambre de películas que los distrajeran y los divirtieran en medio de tantas amarguras, pero también hambre de películas destinadas tanto a criticar y desnudar la sociedad que los había traicionado, como a reivindicar la lucha y el sacrificio como único camino para alcanzar la felicidad en el futuro. En esa segunda clase de películas es que se destaca nítidamente “Las Uvas de la Ira”. 

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"Las Uvas de la Ira" Primera Parte


"Las Uvas de la Ira" Segunda Parte


"Las Uvas de la Ira" Tercera y última Parte

martes, 10 de abril de 2012

"Tiempos Modernos": una película de Charles Chaplin sobre su tiempo y su mundo.

                                                                                             
"Tiempos Modernos” es una película dirigida y protagonizada por Charles Chaplin. Filmada en los Estados Unidos en el año de 1936 (en momentos en que el cine sonoro recién estaba dando sus primeros pasos), “Tiempos Modernos” es una película cómica, pero que, al mismo tiempo, nos habla permanentemente de algunos temas muy serios que afligían (y afligen) a la Humanidad. En ese sentido, más allá del humor, esta película nos muestra dos dramas.
Por un lado, el ritmo frenético del trabajo en las fábricas, donde el trabajador, subordinado completamente a la velocidad de las máquinas y las cadenas de montaje, sufre irremediablemente las consecuencias de esa forma de producción (impulsada por posturas teóricas y prácticas tales como el “Taylorismo” y el “Fordismo”) que busca producir cada vez más cosas en cada vez menos tiempo, con el fin de aumentar las ganancias de los capitalistas.  
Por otro lado, “Tiempos Modernos” (filmada, repetimos, en 1936, en momentos de la llamada “Gran Depresión” de los Estados Unidos provocada por la “Crisis de 1929”) nos muestra algunas de las consecuencias de esa gran crisis periódica del Capitalismo en el seno de la sociedad norteamericana: el desempleo, el empeoramiento en las condiciones de vida, la desigualdad social, la pobreza, el hambre y la actitud de la Policía, la cual, defendiendo a las clases sociales más poderosas, reprimía violentamente a los más humildes.

Esta película no se ha salvado de las críticas (por ejemplo, algunos sostienen que algunas escenas “sobran” pues “alargan” la película no aportándole ningún elemento de importancia), pero más allá de esos reparos, “Tiempos Modernos” es una de las películas más importantes de la historia del Cine. Una película donde Charles Chaplin hace gala de su genialidad, como, por ejemplo, en una de las últimas escenas de la película donde “Carlitos”, convertido en un mozo de restaurant muy particular, interpreta una canción que resulta inentendible, no solo para nosotros que hablamos español, sino para todas las personas del mundo. Precisamente, con esa canción (llamada “Titina” y compuesta con una mezcla de palabras inventadas y de distintos idiomas), Charles Chaplin (figura fundamental de la época del cine mudo) desliza una crítica hacia el cine sonoro, pues él veía con suma desconfianza ese avance técnico en el arte cinematográfico. 


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"Tiempos Modernos" Primera Parte


"Tiempos Modernos" Segunda y última Parte